Aprender más y mejor usando emociones
¿Recuerdas tus clases de niño? ¿Te gustaba ir al colegio? ¿Crees que tu paso por el sistema educativo ha sido fructífero? Muchos profesores opinan que la respuesta a estas tres preguntas es un “no” y proponen una enseñanza alternativa, que se basa primero en emocionar, luego en entender y aprender y finalmente en memorizar. Además, destacan la importancia del trabajo en equipo y de que el alumno se implique y colabore en la clase.
Los métodos de enseñanza diferentes se expanden por todo el mundo y son muchos los científicos que estudian cuál es la mejor forma de aprender. El fracaso escolar en nuestro país no ha parado de aumentar y muchos se plantean que quizás se deba a un sistema educativo tradicional y anticuado, al que le cuesta mucho llamar la atención y despertar la curiosidad de los pequeños ¿hay una alternativa a las clases magistrales de toda la vida? ¡Pues claro que sí!
Pero ¿cuál es la solución? Pues la solución pasa por emocionarse, nuestro cerebro muestra más actividad cuando algo nos sorprende o despierta nuestra curiosidad y esto no es algo difícil de llevar a las aulas. Por ejemplo, si en una clase introducimos primero un vídeo, una historia, incluso un juego, conseguimos que nuestro público se muestre receptivo a entender qué es lo que ocurre, en este estado, nuestra mente está dispuesta a absorber información y podemos pasar a los mapas conceptuales, o las explicaciones interactivas, haciendo participar al alumno. Finalmente, llega el trabajo de memorización, pero a estas alturas ya resulta mucho más sencillo. Este tipo de aprendizaje es más duradero y, si el estímulo es lo suficiente bueno, el conocimiento no se olvida nunca.
En Sinergia Formación creemos en una forma distinta de enseñar, motivante y creativa, queremos tu cerebro activo desde el instante cero ¿te animas a probarlo?
