Malos hábitos que pueden costarte el trabajo
Está claro que todos tenemos defectillos y malos hábitos. No es grave si se trata de algo esporádico pero en algunos casos podrían llegar a costarte el trabajo. Comportamientos negativos que pueden convertirte en un mal empleado y causar una muy mala impresión.
Pero ¿a qué hábitos nos referimos?
- Mentir. Se trata de un hábito muy, muy feo. Mentir sobre tus horas de trabajo, hacer mal uso de documentos de la empresa, quitarle mérito a tus compañeros para atribuírtelo…La deshonestidad es un terreno resbaladizo y peligroso que nunca debes pisar.
- Procrastinación. El dejar las cosas para el último minuto nunca es una buena idea. Posponer trabajos o tareas hasta el último día puede suponer un mal impacto para tus compañeros que estén esperando por ello. Las prisas nunca son buenas y puedes provocar grandes molestias.
- La negatividad no crea un buen entorno de trabajo. Es una práctica que conlleva muchos dolores de cabeza.
- Impuntualidad. Si una vez tras otra llegas tarde a trabajar, muestras una actitud de falta de cuidado y de falta de respeto hacia tus compañeros de trabajo y tus jefes.
- Mala comunicación. Abusar del correo electrónico cuando puedes hablar las cosas personalmente o por teléfono, es un mal hábito. Es muy fácil parecer brusco por correo electrónico.
- Lenguaje corporal. Si evitas el contacto visual o tienes un apretón de manos débil por ejemplo, se puede percibir como un mal hábito de comunicación no verbal o llegar a interpretarse como un acto grosero.
- Distracción. Si estás distraído y no prestas la atención necesaria, supondrá un mal hábito que dará muy mala impresión.
- Solitario. ¿Tienes la mala costumbre de hacer todo por tu cuenta? ¿Evitar a los compañeros? Deberías saber que por lo general las personas que saben trabajar en equipo experimentan un mayor éxito en el trabajo.
- Modales. Aprender a decir “por favor” o “gracias” es un hábito INDISPENSABLE. Los modales son importantes así que procura no ser maleducado.
Estos son solo algunos malos hábitos que pueden darte problemas en el trabajo con lo que ya sabes: evítalos.